Los hábitos de consumo han cambiado. Vivimos en la era de la inmediatez y las tecnologías han dado paso a nuevos modelos de negocio que se adaptan mejor a nuestro ritmo de vida acelerado, como el vending o el micromarket.
De hecho, un 17% del comercio al por menor está formado por los mini markets, que ya superan cifras de más 5.1 billones de dólares, según indica la Asociación Nacional de Merchandising Automático de EEUU.
Los trabajadores no disponen del tiempo suficiente para comer en restaurantes o para volver a sus casas. Por ello, los espacios de vending dentro de las empresas se han convertido en el lugar idóneo para realizar las comidas y los descansos.
Junto a las máquinas vending, han aparecido los micromarkets, otro modelo de negocio de venta rápida de alimentos, que ha tenido mucho éxito en Estados Unidos y que está aterrizando en empresas europeas y españolas.
Negocio vending | ¿Qué son los micromarkets?
Son pequeñas tiendas autoservicio, en las que los clientes eligen los alimentos que se encuentran en estantes abiertos y neveras, para después escanear su código de barras en una caja automatizada y pagar con efectivo o con tarjeta.
Este espacio es ideal para las grandes empresas, que disponen de una zona de descanso y que apuestan por un entorno flexible y colaborativo para sus trabajadores.
Las máquinas vending y los micromarkets son muy similares, pero tienen algunas diferencias. Por ejemplo, en los micromarkets, los clientes pueden tocar los alimentos y comprar varios productos con un solo pago.
Este tipo de negocio ofrece muchas innovaciones adaptadas a las nuevas demandas de los consumidores, que están cada vez más preocupados por su alimentación y por la protección del medio ambiente.
Por un lado, en estas pequeñas tiendas, los clientes tienen más libertad de elección. Pueden observar los productos de cerca y leer sus ingredientes, alérgenos y valor nutricional, para así asegurarse de que cumple con sus expectativas.
Por otro lado, los micromarkets también permiten ofrecer una oferta de alimentos más saludables con platos cocinados de manera artesanal, ensaladas del día, frutas y verduras.
Además, es un negocio sostenible con el medio ambiente, ya que permite usar otros envases diferentes al plástico, como el cristal o el cartón.
La instalación y la reposición de los alimentos es muy similar a una máquina vending y requiere del mismo espacio dentro de la empresa.
Sin embargo, este negocio también presenta desventajas, como la necesidad de contratar una persona que se encargue de la seguridad del negocio para evitar saqueos o que, en tiempos de pandemia, es aconsejable evitar el contacto directo con los productos.